Este sábado conseguimos, en el pabellón de Soto de la Marina y frente a Calasanz, la tercera victoria de la fase definitiva. El partido se presentaba complicado, ante uno de los favoritos para ganar esta liga (en alevín había estado en 1ª) aunque no la haya comenzado con muy buen pie.
Empezamos el encuentro de mala manera. Un parcial de inicio de 0-6 en contra nos descentró, y estuvimos algo erráticos durante el priemr cuarto. Cedimos demasiados rebotes bajo nuestro tablero, aparte de los tres o cuatro triples recibidos, y sólo alguna acción puntual hacía que no se despegasen (13-19 min.10).
En el segundo cuarto, sin embargo, dimos una lección de basket ofensivo. Anotamos 32 puntos con mucha facilidad, cargando el rebote en ataque, aunque fuimos muy débiles en el 1c1 (ellos nos metieron 20). Al descanso, al menos, estábamos por encima en el marcador.
En el tercer cuarto rematamos el partido. La agresividad en defensa aumentó, por lo que robamos muchos balones saliendo mucho al contraataque. Supimos jugar con calma, y perdimos muy pocos balones. Al final de este parcial, el marcador indicaba un 69-45 para los locales.
Finalmente, en el último, nos dejamos llevar un poco. Circulamos mucho el balón y dominamos en ambos tableros (en los últimos minutos anotamos mucho en segundas oportunidades) para acabar venciendo al teórico tercer equipo de la división por el resultado de 95-61.
La semana que viene, San Felices (esperemos que no se nos atragante su defensa zonal) y, dentro de dos, la primera "final": recibimos a Castro.
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